Los gatos son especialmente sensibles a los traslados al veterinario. Sacarlos de casa en un transportín suele ser una experiencia muy traumática para ellos. Si a esto añadimos los ruidos y olores al llegar a la clínica, la visita al veterinario puede ser una experiencia muy negativa para ellos y para sus propietarios.
Para poder ofrecer un espacio más tranquilo y seguro solamente para ellos, tenemos adaptadas nuestras instalaciones.
L’Arca Felina es un espacio diferenciado y separado del resto de la clínica. Disponemos de:
- Acceso separado.
- Sala de espera exclusiva para gatos.
- Consulta felina.
- Hospitalización felina separada y aislada de los perros con jaulas de larga estancia “Cat friendly” certificadas por la ISFM (Internacional Society of Feline Medicine).